Follada a cuatro patas en medio del parque
Estas cosas no se ven por el retiro, ya podían ser las madrileñas tan golfas como esta rubia. La uy golfa se ha ido con su novio a dar un paseo en barca y se han puesto tan cachondos que en la orilla han decidido saciar su apetito sexual con una buena follada. Él aprovecha su calentón y se la mete por el culo, algo que nunca le dejaba hacer.